
¿Por qué y para qué una comisión de epidemiología en el gremio?
La clínica nos suministra a todos una casuística que nos permite tener una perspectiva sobre el estado de salud mental de la población que atendemos pero segmentada y por lo tanto verídica pero distorsiva. Hasta ahora nadie, ni el ministerio ni la dirección de salud mental tienen documentado lo que ocurre en el área. Existió un intento en la gestión del Dr. Ricardo Soriano como Director de Salud Mental, durante cuya gestión se sancionó la ley 448 de Salud Mental, y que se diluyó en el período posterior al dejar éste el cargo. No somos epidemiólogos y sólo tenemos los escasos conocimientos al respecto que nos proveyó la formación de grado y algún curso post grado seguido por interés o curiosidad. Sin embargo tenemos la preocupación por la salud mental de nuestra población en esa dimensión que sólo aborda la epidemiología, es decir, lo que se ciñe sobre la salud del pueblo (Epi = sobre/en derredor – Demos = pueblo – logos = estudio)
La importancia de encarar inicialmente esta comisión se cifró en la necesidad de poder visibilizar la demanda insatisfecha detectada en salud mental que sin embargo no se encuentra documentada salvo excepciones parciales. Los condicionamientos generales de la vida de la población varían y afectan su salud mental como resultó más que evidente en los duros años 2001, 2002 y 2003 cuando aumentaron inusitadamente las consultas médicas presentando sintomatología inespecífica (no médica) y resultó evidente que se trataba de los efectos psicológicos de la tremenda crisis social sin precedentes. Por ese antecedente se incorporaron por primera vez en la guardia de los hospitales generales un psiquiatra y un psicólogo. Pero nunca se mensuró seriamente el fenómeno y la medida resultó un paliativo, más útil para el sistema médico que para la población afectada.
La sorpresiva pandemia amplió y profundizó aún más la necesidad de abordar desde nuestro gremio una perspectiva epidemiológica del estado de la salud mental de la población. Una situación ya crítica se agudizó ante la amenaza viral y se vislumbra todavía peor como efecto de las consecuencias económicas de la actual crisis sanitaria.
Sabemos que el tamaño y carácter de la tarea puede asustar pues no resulta fácil elevar la mirada sobre el conjunto de la población para identificar y relevar indicadores del estado, diagnosticar tendencias a partir de éstos y precisar detalles significativos que permitan pensar abordajes. Por otra parte los desarrollos ya existentes en la epidemiología crítica sobre el área de salud mental no son ni tan extendidos ni tan antiguos. Sin embargo, los datos indispensables para esa tarea están en nuestras manos. Sólo nosotros, a partir de la casuística que manejamos, si somos capaces de transformar esos valiosos datos en un registro extendido, sumando nuestras experiencias y diseñando un sistema práctico de lectura de los mismos, podemos construir una herramienta potente a la hora de defender la salud mental de calidad y gratuita con fundamentación documentada sólida y que a la vez resulte indispensable para diseñar políticas en la materia.
Objeto: iniciar campaña de visibilización del papel de los colegas en actividades de su efector
Por favor llenar y remitir a la brevedad posible al email: [email protected]